Estados Unidos necesita más viviendas asequibles. Muchas más. Entre 2001 y 2013, el país perdió 2,4 millones de viviendas de alquiler (tanto a precio de mercado como subvencionadas) que eran asequibles para personas que ganaban menos del 50% de los ingresos medios de la zona. Construir más unidades ayudará, pero preservar las viviendas asequibles existentes también es fundamental: Suele ser más barato que la nueva construcción, evita el desplazamiento, aprovecha los patrones de uso del suelo existentes y permite que la gente permanezca en el lugar donde ya vive. Pero la conservación también presenta sus propios retos, y a menudo requiere la combinación de múltiples fuentes de financiación federales, estatales y locales, así como una mayor colaboración entre promotores, responsables políticos y otras partes interesadas.

Leer el artículo completo